Una lengua se muere cuando se extinguen sus hablantes o cuando se deja de utilizar. Hoy hablamos de por qué mueren los idiomas.
Hay idiomas o lenguas que existían hace milenios y que actualmente no encontramos en nuestra sociedad. ¿Por qué murieron? Hoy vamos a descubrir el proceso de extinción de los idiomas en la historia.
Algo se muere en el alma cuando un idioma se va. Así podríamos meter la estrofa de esta canción popular ejemplificando lo que ocurre cuando una lengua desaparece en nuestras vidas.
Es cierto que, si un idioma se extingue, parte de la historia y educación de la sociedad que la hablaba también muere con él. Su supervivencia, además, se mantiene por otros factores externos que el propio pueblo hablante no puede evitar como el área político, educativo, cultural o religioso.
También, los fenómenos migratorios y el auge de Internet hacen que la desaparición de idiomas sea una realidad latente en nuestras vidas y cada vez sean más las lenguas que dejen de existir en nuestro entramado lingüístico.
¿Es posible que un idioma se extinga?
Seguramente más de una vez te has llegado a replantear si es posible que un idioma desaparezca. Esto es tan cierto que, aunque ya hay vestigios en la cronología mundial de que ha sucedido, actualmente siguen en declive y muriendo muchas lenguas a nuestro alrededor.
La ONU comenzó a hacer frente a esta amenaza y, gracias a la edición del “Libro rojo de las lenguas amenazadas” muestra la posición actual que tienen los idiomas y cuál es su grado de vitalidad.
Pero no desaparecen los idiomas más fuertes de la sociedad como el inglés, el francés o el español, de los que aún puedes encargar traducciones sin problema, sino que mueren los que contienen una baja población parlante en sí mismos.
Un idioma muere cuando no hay nadie que lo hable, es un proceso natural. Se necesita a alguien que lo hable y le transfiera a las posteriores generaciones, y muchas veces esto no ocurre.
Existen lenguas que solo habla un 4% de la población y son eclipsadas por las lenguas mayoritarias que se imponen, sobre todo en ámbitos internacionales donde su uso es obligatorio, pero no el de las lenguas minoritarias.
Los expertos, además, determinan que hay otros factores condicionantes para que esté en peligro de desaparición una lengua: las variaciones en las áreas de uso de la lengua; la existencia de material didáctico de la lengua; la calidad y cantidad de documentos del idioma o la propia actitud de los componentes de un lugar con su lengua natal.
¿En qué zonas del mundo existe una alta probabilidad de extinción de lenguas?
Donde el riesgo de desaparición de un idioma es más grande es regiones del mundo con mayor diversidad lingüística. Zonas como el África Subsahariana, Sudamérica o Melanesia son algunos de los territorios globales.
Es por tanto de bien analizar qué podemos hacer en la situación de peligro de estos países y cómo solventarlo. Sobre todo, apostar por políticas educativas que incluyan los idiomas con tendencia a morir próximamente y así preservar su conservación.
¿Cuántas lenguas se han extinguido en la actualidad?
Es complicado llegar a una cifra exacta de los idiomas desaparecidos históricamente. Se han hecho muchas estimaciones en cuanto a saber cuántos idiomas pueden haber muerto a lo largo de la existencia del hombre.
Muchos lingüistas apuntan a hacer un cálculo estimado según continentes: En Europa y Asia Menor cerca de 75 idiomas desaparecidos; o en países como EE. UU. puede haber muerto más de 115 idiomas en total.
Lenguas como el aasax de Tanzania, el saamí de Akkala, el eyak de Alaska o el ubyh de Turquía son las más conocidas. En nuestra agencia de traducción luchamos día a día para traducir textos hacia lenguas en peligro de extinción y conseguir que no desaparezcan. Cierto es que los servicios de traducción habituales no suelen ser de lenguas raras o en peligro de extinción, pero alguna vez que otra, hemos tenido el honor de traducirlas.
Está en nuestra mano el poder conservar las que aún siguen vivas. ¿Por qué no combinar las lenguas mayoritarias junto con las minoritarias en nuestras vidas diarias? No es algo que sea imposible de realizar, y así enriqueceríamos nuestra sociedad aún más con variedad lingüística.
Esto lo hacen a diario los traductores profesionales y no hay nada más placentero que poder hablar y escribir en varios idiomas con total soltura y comodidad, ¡vivamos en una sociedad metalingüística de calidad!